5 formas en que el 5G transformará la atención sanitaria

En la mayoría de los casos, antes sólo teníamos una opción cuando enfermábamos y necesitábamos atención médica: viajar a un médico u hospital.

Para las personas que viven en zonas rurales, con médicos situados a varios kilómetros de distancia, desplazarse mientras se está enfermo puede ser un reto y requerir mucho tiempo. Sin embargo, con la llegada de la telesalud y los sistemas de monitorización remota a domicilio, podemos recibir atención desde la comodidad de nuestro hogar. Los médicos podrían hacer recomendaciones tras una breve videollamada, e incluso presentar solicitudes de prescripción.

Sin embargo, esta monitorización a distancia, junto con los sofisticados equipos de diagnóstico por imagen, puede suponer una carga adicional para las redes de las empresas del sector sanitario. Esto suele aumentar la congestión y ralentizar la velocidad de la red, sobre todo en el caso de los proveedores de servicios sanitarios que pueden estar interactuando con docenas de pacientes al día.

El retraso no solo es frustrante para quienes lo utilizan, sino que la mala calidad puede retrasar la atención al paciente, lo que podría perjudicar los resultados a largo plazo. Y como el uso de las tecnologías del Internet de las Cosas (IoT) sigue creciendo, se espera que la cantidad de datos en las redes no haga más que aumentar.

Las tecnologías 5G tienen el potencial de ayudar a resolver estos desafíos. A continuación, cinco formas en las que el 5G puede ayudar a las organizaciones sanitarias a satisfacer las crecientes demandas de la transformación digital. El 5G, la quinta generación de tecnología inalámbrica celular, ofrecerá una potencia de conexión masiva y velocidades rápidas que pueden ayudar a transformar la forma en que se presta la asistencia sanitaria. 

1. Transmisión rápida de grandes archivos de imágenes

Las resonancias magnéticas y otros equipos de imagen suelen ser archivos muy grandes, y a menudo deben enviarse a un especialista para su revisión. Cuando la red tiene poco ancho de banda, la transmisión puede tardar mucho o no enviarse con éxito. Esto significa que el paciente espera aún más tiempo para el tratamiento y que los proveedores pueden ver a menos pacientes en la misma cantidad de tiempo. 

Añadir una red 5G de alta velocidad a las arquitecturas existentes puede ayudar a transportar de forma rápida y fiable enormes archivos de datos de imágenes médicas, lo que puede mejorar tanto el acceso a la atención como la calidad de la misma. 

2. Ampliar la telemedicina

La telemedicina requiere una red que pueda soportar vídeo de alta calidad en tiempo real, lo que suele implicar redes cableadas. Con el 5G, los sistemas sanitarios pueden habilitar las redes móviles para gestionar las citas de telemedicina, lo que puede aumentar enormemente el alcance del programa.

Cuando los sistemas sanitarios utilizan esta tecnología, los pacientes suelen recibir tratamiento antes y tener acceso a especialistas que de otro modo no estarían disponibles. También puede permitir que los médicos y otros miembros del personal colaboren de forma más eficiente.

3. Mejora de la RA, la RV y la computación espacial

Aunque la realidad aumentada (RA), la realidad virtual (RV) y la computación espacial ya se utilizan en la asistencia sanitaria de forma limitada, el 5G puede llegar a mejorar la capacidad del médico para ofrecer tratamientos innovadores y menos invasivos. Entre las muchas aplicaciones potenciales de la 5G, algunas de las más interesantes son su papel en la simulación de escenarios médicos complejos y la posibilidad de tratamientos alternativos para los enfermos graves.

AT&T está trabajando en la vanguardia de este apasionante campo, explorando las oportunidades de aplicar la 5G a los retos médicos. AT&T está colaborando con VITAS® Healthcare para estudiar los efectos de la RA y la RV habilitadas para 5G en el compromiso del paciente. El objetivo es reducir el dolor y la ansiedad de los pacientes terminales en cuidados paliativos proporcionando contenidos calmantes y de distracción a través de la RA y la RV habilitadas para 5G.

4. Monitorización remota fiable y en tiempo real

Mediante el uso de dispositivos IoT, los proveedores de atención sanitaria pueden monitorizar a los pacientes y recopilar datos que pueden utilizarse para mejorar la atención personalizada y preventiva.

A pesar de los beneficios, el uso de la tecnología de monitorización remota está limitado por la capacidad de la red para manejar los datos. La lentitud de la red y la falta de fiabilidad de las conexiones podrían impedir a los médicos obtener los datos en tiempo real que necesitan para tomar decisiones sanitarias rápidas.

Con la tecnología 5G, que tiene menor latencia y mayor capacidad, los sistemas sanitarios pueden ofrecer monitorización remota a más pacientes. Así, los proveedores pueden estar seguros de que recibirán los datos que necesitan en tiempo real y podrán proporcionar la atención que sus pacientes necesitan y esperan.

Con el 5G, los traductores pueden realizar videoconferencias con el paciente y el médico utilizando modelos en el borde de la red con baja latencia.

5. Inteligencia artificial

Muchas funciones sanitarias clave están empezando a utilizar la inteligencia artificial (IA) para determinar posibles diagnósticos y decidir el mejor plan de tratamiento para un paciente concreto. Además, la IA puede ayudar a predecir qué pacientes tienen más probabilidades de sufrir complicaciones postoperatorias, lo que permite a los sistemas sanitarios realizar intervenciones tempranas cuando sea necesario.

Las grandes cantidades de datos que se necesitan para el aprendizaje rápido en tiempo real requieren redes ultrafiables y de gran ancho de banda. Además, los proveedores a menudo necesitan acceder a los datos desde sus dispositivos móviles.

Al pasar a las redes 5G, las organizaciones sanitarias pueden utilizar las herramientas de IA que necesitan para proporcionar la mejor atención posible, desde cualquier lugar del hospital o la clínica.

Prepararse para el cambio

Al habilitar todas estas tecnologías a través de las redes 5G, los sistemas sanitarios pueden mejorar la calidad de la atención y la experiencia del paciente, reducir el coste de la atención y mucho más.

En lugar de limitarse a reaccionar a las condiciones de los pacientes, las redes 5G pueden dar a los proveedores la capacidad de proporcionar una atención más personalizada y preventiva, que es la razón por la que muchos empleados de la salud se convirtieron en proveedores en primer lugar.